Heartbeat 14b

Título: Heartbeat
Autora: KamJi y en éste capítulo tenemos la colaboración de nuestra compañera
Grupo: 2PM
Género: WAFF
Couple: Wooyoung / desconocida con parecido inesperado con la escritora xDDDD
Rating: +18 (primeros capítulos no pero... en fin xD)

¡¡¡ADVERTENCIA !!!

Este es el capítulo de los +18 años XD y la autora no es ni siquiera culpable de que el capítulo sea tan... pornoso jajajaja.

Escribí el capítulo hasta la línea de puntos rojos que voy a colocar en el texto a partir de ahí una amiga mía pensó que este capítulo sería...inolvidable... me tuvo una tarde taquicárdica perdida gracias a ella... disfrutad XDDD.

.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:.

Después de un día intenso, llegó la hora de irse cada uno a su dormitorio.
Khun y Victoria dormirían juntos en la habitación de los padres de ella, Junsu y Junho en otro dormitorio, Chansung y Taec en otro y… Sully sola… realmente era un poco deprimente, si yo fuera la que se quedara sola en el dormitorio sería… afuf… sí, definitivamente deprimente. Obviamente Wooyoung y yo compartíamos dormitorio.
Cuando nos íbamos al dormitorio Taec se puso delante de la puerta de nuestro dormitorio.

-Emmm, tened cuidado que la noche es larga y no sé cuanto grosor tienen estas paredes…- sentenció serio mirándonos a los dos- vamos que me dejéis dormir, que bastante tengo con los ronquidos de Chansung.

-¡ Yo no ronco!- saltó ofendido.

-Tú no roncas… sobrepasas la barrera del sonido conocida- comenzó a hacerle muecas para que se cabreara más y Chansung le arreó un porrazo en la cabeza- ¡AY!- dijo rascándose la cabeza.

-Para que vuelvas- dijo metiéndose a su habitación, pero antes se asomó por la puerta-¡ah!…dejadme dormir- y se metió de inmediato.

-¿Ves? Piensa igual que yo… regulad el tono pasional ¿OK?

-Eres imbécil Taec- dijo Wooyoung dándole un puntapié y empujándome al dormitorio cerrando la puerta detrás de nosotros- estos tíos son tontos… de verdad… tontos del todo…

-Oppa…- dije pensando en las palabras de los chicos con cuidado- sabes que van a estar atentos… ¿lo sabes?

-Naaa, no creo, están de broma Eun Sun, sabes cómo son- dijo intentando quitarle peso al asunto.

-Sí… ya… en fin- dije con poco convencimiento- creo que me voy a duchar y a meterme en la cama- dije desanimada pensando en nuestra nula privacidad en esa casa.

-¿Puedo?- dijo con cara de felicidad y yo negué con la cabeza.

-Estas paredes tienen ojos, oídos y miradores con vistas al mar…

-Pero mujeeeeer- dijo con cara de pena y cerré la puerta para no tener que mirar sus ojillos brillosos de Bambi.

Lo cierto es que deseaba con todas mis fuerzas que entrara conmigo en el baño y su cara de pena no había ayudado nada, pero la advertencia de Taec y Chan me hacía dudar, sabía que en parte me estaban vacilando para que precisamente pasara lo que estaba ocurriendo en ese momento, pero era inevitable no sentir corte ante aquella situación, mientras pensaba en ello me metí en la ducha, a ver si la ducha me enfriaba los pensamientos y pensaba con un poquito de lucidez.
Después de un rato se abrió la puerta del baño.

-Sun ah- dijo la voz de Wooyoung al otro lado de la mampara.

-¿Qué quieres?- dije tapándome instintivamente aunque ya me había visto desnuda sentía algo de vergüenza ante la situación.

-Quería decirte algo- dijo abriendo la puerta de la mampara con sumo cuidado y asomando un dedito que fue poco a poco siendo una mano que finalmente te convirtió en un brazo, unido a un cuerpo y entonces vi su cara, me miraba con cara de fingida inocencia y entonces sonrió- ¿te froto la espalda?

-Tú… Wooyoung… tú deberías irte- dije mirando su rostro que estaba casi pegado al mío.

-¿Debería?- dijo sin borrar aquella maravillosa sonrisa tentadora y tocando su nariz contra la mía.

-S…sí, deberías… porque no quiero que nos escuchen- dije perdiendo fuerza con cada una de mis palabras perdiéndome en sus ojos.

-En la ducha no se escucha nada- dijo metiéndose en la ducha vestido y acorralándome contra la pared- el agua amortigua el sonido ¿no lo sabías?

Pues no… no lo sabía pero en ese momento decidí que me daba igual, el amortiguamiento del agua, la dinámica del universo vertical, horizontal y el frenesí de los patos egipcios… y le comencé a besar, ya podía escuchar quien quisiera detrás de las paredes, solo quería estar con él.
Él me devolvió el beso y me abrazó con ganas como si me retuviera para que no me escapara, pero no hacía falta, estaba en el lugar que quería estar, entre sus brazos. Le quité la ropa mojada lanzándola sin mirar hacia donde y seguí besándole mientras el agua tibia nos mojaba, jamás me había sentido así nunca, de hecho jamás hubiera podido pensar que tuviera tan poco autocontrol… pero él acababa con él… cuando me levantó del suelo me puso contra la pared y entonces si que perdí el control… me abracé a el y ya no había gente en el mundo… sólo él y yo… y el agua…

****************************************************************

masajeándolos, haciendo que estos se hinchasen  y mis pezones se convirtiesen en dos pequeños puntos tensos y erectos por el placer de sus caricias.
Mis gemidos iban en aumento, haciendo que ni siquiera el ruido del agua tapase nuestros gemidos. Su cabeza fue descendiendo hasta ponerse con mis pechos y si ya creía que antes con sus manos la tortura era insufrible, su boca desencadenó en mí un incendio que creí me consumiría ahí mismo. Se metió uno de mis pechos en su boca y con los dientes y la lengua lo fue mordiendo y después calmando. Mis pezones se volvieron aún más sensibles si eso era posible y mis uñas dejaron rojas marcas en su espalda debido a la intensidad de lo que me estaba haciendo sentir. Estaba cerca del límite, pero siempre me traía de vuelta y yo me estaba poniendo cada vez más violenta por un dolor no calmado y que clamaba satisfacción inmediata pero él mantenía atadas en corto las riendas de la pasión. Cuando finalizó con ese pecho pasó al otro, al que dedicó igual atención. Eché mi cabeza atrás gimiendo del tremendo placer que me estaba haciendo sentir. Me mordí el labio inferior para no ser demasiado escandalosa pero no logré durante mucho tiempo, ya que mientras su boca seguía ocupada con uno de mis pechos, una de sus manos se desplazó hasta la unión de nuestros cuerpos, encontrando a la primera, mi clítoris, que empezó a acariciar, haciendo que se pusiera erecto y disparando las sensaciones hasta unos límites que desconocía. Su boca abandonó mi pecho, haciendo que me sintiese huérfana de esas atenciones que tanto estaba disfrutando.

-Abre los ojos- Su voz, ronca y cargada de pasión tenía un tono imperioso y aunque me costó trabajo, conseguí abrirlos. Lo que vi me asustó durante un segundo. Una pasión y un ansia de posesión primitivos pero sabía que con él siempre estaría segura y que no me avasallaría. Le dediqué una sonrisa en la que vio la satisfacción que me estaba dando y que estaba logrando su objetivo. Me lancé a besarle con toda la pasión que estaba sintiendo y de nuevo el fuego volvió a desencadenarse en nuestras bocas. Estuvimos así durante un par de minutos mientras me llevaba al límite de la pasión con sus caricias en mi clítoris pero sin dejar que alcanzase el orgasmo. De repente, su mano abandonó mi entrepierna y cogiéndome por las nalgas, me alzó y me penetró de una sola y poderosa embestida, haciendo que abandonase el beso y gimiese al sentirlo por fin dentro de mí. Abrí los ojos y lo vi sonreír con auténtica satisfacción masculina. En esos momentos sentí deseos de atizarle por ser tan presuntuoso pero lo que me estaba haciendo sentir era demasiado intenso y por lo tanto se lo perdoné.
Las embestidas empezaron de manera lenta. Salía poco a poco de mi cuerpo, para volver a entrar poco a poco, haciéndome gemir con cada uno de sus movimientos. Lo estuvo alargando hasta que mis gemidos empezaron nuevamente a sobrepasar el nivel del ruido del agua. Recordé las advertencias de Taec y Chan, pero ya me daba igual. En ese momento y lugar sólo existíamos nosotros dos y al diablo con el resto.
De repente, sus embestidas empezaron a ser más rápidas y fuertes, haciendo que mis gemidos aumentasen en la misma proporción. Finalmente, tras unos minutos que me parecieron eternos llegué al orgasmo, haciéndome gritar como nunca lo había hecho. Él alcanzó el orgasmo poco después y su gemido no le anduvo a la zaga al mío. Salió de manera delicada de mi cuerpo y me depositó en el suelo con sumo cuidado mientras me sujetaba. Cuando vio mi cara enrojecida, sonrió con satisfacción pero al ver mis labios hinchados y mis pechos con marcas abrasivas por su pasión, me besó con una gran delicadeza como pidiéndome perdón por su fuerza. Le sonreí y él vio que lo entendía.

-Será mejor que te lleve a la cama, porque no quiero que te caigas en medio de la ducha.- Me sonrojé ante su presunción y le pegué un pequeño golpe en el brazo mientras escondía mi cabeza en su pecho. Se echó a reír, cerró el agua, cogió una toalla y me envolvió en ella con delicadeza, mientras me cogía en brazos y me llevaba de vuelta a la cama, donde me dejó con delicadeza.

-Ahora vuelvo-Entró de nuevo en el baño y cuando salió, tenía una toalla puesta en la cintura y traía otra en la mano, con la que me empezó a secar el cabello con delicadeza.- Creo que les hemos dado un buen espectáculo a Taec y Chan, Mañana no nos lo dejarán pasar- Incliné la cabeza muerta de la vergüenza y él empezó a reírse con suavidad- Tranquila, no pasará nada, estaré a tu lado en todo momento y además, piensa que en realidad sienten envidia por no tener a ninguna chica con la que poder pasar la noche. Dejó de secarme la cabeza y se levantó a por un cepillo. Me volví para peinarme yo sola pero él no me dejó y se puso a desenredarme el cabello con suma delicadeza, hasta que no quedó un mechón sin desenredar.
-Lista y ahora será mejor que nos acostemos y descansemos- Me cogió la barbilla entre el índice y el pulgar y depositó un suave beso en mis labios. Abrí la cama, me quité la toalla y me metí completamente desnuda en ella. A Wooyung le gustó y eso e hizo lo mismo.
Me acercó hacia él para darme un beso y echarnos a dormir pero de nuevo la pasión volvió a estallar entre los dos. De nuevo tratamos de controlar el nivel de nuestros gemidos pero fue imposible y cuando acabamos, estábamos exhaustos y sudorosos, quedándonos dormidos al poco tiempo, cada uno en los brazos del otro.
Mañana sería un día duro, pero merecería la pena aguantar todas sus burlas y chistes después de todo lo que me había hecho sentir Wooyung.

.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:._.:*~*:.