Estreno - Tik Tok 01

Título: Tik Tok
Autora: Isa_Juk ¿
Grupo: 2PM pero aparecen personajes de otros grupos :3
Género:Romance/drama/comedia/
Couple/s: TaecSu
Rating: +18
Comentario: Hola a todos. Pues nada, espero que os guste mucho este fic basado en 2pm, sobre todo en la historia de Junsu y Taec. Es todo original, todo salido de mi cabeza. La historia la narra Junsu, así que es el principal protagonista, pero salen los demás miembros, y algunas colaboraciones de artistas de otros grupos o solistas.

Me animé a hacer algo así por que llevaba tiempo queriendo hacer un fic, siempre he escrito historias originales, pero nunca me dio por un fic, y que fuera yaoi principalmente. Es mi primer Fanfic, y encima yaoi. En la historia encontraréis algo de drama en cuanto a cómo se siente Junsu en cada dia que pasa, amor, desamor, romanticismo, idas de olla de Junsu con su mente, osea, un poco de comedia, y nada, mucho pensamiento de mi cabeza plasmado en este escrito.

Pues os dejo con el, espero que sigáis la historia y este blog! Saludos a todos los lectores de Fanfic patatero~

 -CAPÍTULO 1-

Cada día podía hacerme miles de preguntas acerca de miles de cosas que me rondan la cabeza. También podía simplemente no hacer caso de mis pensamientos y hacer odios, o cerebro sordo…

Llevaba encima una mochila colgada de uno de mis hombros, y un libro que me  había prestado Chance. Me lo había recomendado, y hasta que no me lo leyese no dejaría de darme la lata para poder comentar conmigo acerca de lo que él llevaba meses leído.

Me gustaba leer, era una de mis aficiones cuando tenía tiempo libre, pero últimamente no le prestaba mucha atención a eso de leer, mi mente estaba más centrada en mis pensamientos abstractos, que ni ella ni yo muchas veces lográbamos entender…

Caminé varias manzanas  con ese dichoso libro bajo el brazo, iba pendiente de la gente que me rodeaba, iba pendiente de quien estaba  caminando cerca de mí, iba pendiente de quienes estaban en la multitud…iba pendiente por alguna extraña razón por si entre la multitud encontraba alguna cara conocida…

Llegué a la línea de Tren de Honam , bajé las escaleras mecánicas absorto en mis pensamientos…

Unas cuantas escaleras más, y unos cuantos más empujones de gente, me condujeron hasta las máquinas para picar el billete. ¿Mi destino? Lo tenía claro aunque nadase en una tormenta marítima de pensamientos. Busan. Si…tenía que ir a Busan…

Os preguntaréis que pasaba por mi cabeza para querer inconscientemente pensase en Busan…

Nos habían dado vacaciones a todo el grupo, cada uno se había ido a sus ciudades natales, a pasar las vacaciones, relajados, con la familia, con los amigos…pero no habíamos hecho muchos planes juntos esas vacaciones, y yo les echaba de menos…

Supongo que tantas horas con ellos, era motivo suficiente para que mi subconsciente los tuviera en mente, y como no, siempre que pensaba en los momentos que había pasado con ellos durante nuestras largas horas de trabajo, mi sonrisa se dibujaba sobre mi rostro…

Pensaba en mi dongsaeng Chansung a la hora de la comida, siempre teníamos que evitar comer más tarde que él, porque si no, probablemente nos quedaríamos con hambre. Llegar hasta nuestro salón, y ver que esta toda la mesa llena de comida, irte a hacer unas cosas antes de ir a la mesa a reunirte con los demás…no caer en que Chansung rondaba por  la estancia, volver…y encontrarte con media mesa vacia…¿Cómo no acordarme de mi Dongsaeng? A veces…se me pasa por la cabeza colgar en la lámpara de la cocina un racimo de plátanos, eso sí, a la hora de comer, creo que sería un modo astuto de tenerlo entretenido mientras  los demás engullimos la comida antes de que él se dé cuenta de que es una artimaña para que nos deje comer…

Después mis pensamientos surcaban en las atenciones de Khun…Nichkhun-Ah…siempre cuidaba de los más pequeños del grupo, aparte de estar centrado en las llamadas de su familia de Tailandia, y de tener contentas a nuestras hottests que pedían siempre de sus guiños y cuterías que solo Khun podía darlas, aunque su atención siempre estaba más centrada hacia Wooyoung-Ah… Khun lo daba todo por él, y siempre intentaba tenerlo en secreto, aunque en los programas de variedades para dar espectáculo siempre fuera lanzado con nosotros y con Wooyoung… en los kissing games y algunos juegos mas,en privado, intentaba mantener las distancias, y siempre que se acercaba a Wooyoung era con alguna excusa acerca de algún ensayo, coreografía…incluso cuando Wooyoung le daba por hacernos de cocinero, el se quedaba pendiente de el y alagaba a su modo “incognito” la cómoda que Wooyoung nos preparaba. Creo que soy demasiado observador en algunas ocasiones…

Pensando en esto, por supuesto, acababa pensando en Wooyoung…¿En serio no se había dado cuenta de que su Hyung velaba por el en casi todo momento? Yo quería pensar que de verdad se estaba haciendo el tonto acerca de ello…Aun así, se comportaba tan natural con el… Y añado, si, Wooyoung se esmera en hacernos la comida, pero…en esos momentos, prefiero dejar que Chansung se nos adelante y comerme los plátanos que pensaba ponerle de cebo…

Junho Donsaeng…¿Cómo podía tenerle tanto cariño? No sé si me afectaba algo que fuéramos una de las parejas favoritas de nuestras hottest, y eso me hacía  tenerle especial cariño, o simplemente es que mi pequeño Dongsaeng era un pequeñajo que guardaba un loco interior dentro de él, y que a cada uno de nosotros nos tenía engatusados con sus demencias…Cada vez él y yo pasábamos más tiempo juntos… y eso era agradable, me gustaba. Estas con Junho unos minutos, era compartir demencias. Me lo pasaba muy bien con el…

Pitidos, pitidos… “corre” pensé. El tren se iba sin mi cómo no me diera prisa. No podía perder tiempo para llegar a Busan…desde Daegu había sólo tres paradas, pero yo sentía que se me harían algo eternas…

Taecyeon…Taecyeon…Taecyeon…¿Debería mi mente tener un espejo delante para ver si se aparecería como una superstición?

¡¡Oh, maldito Trol!! ¿Por qué debíamos compartir habitación? Por su culpa debía de saltar al despertarme…por su culpa, alguna vez que otra me  metía algún que otro golpetazo contra el suelo…por su culpa tenía la cabeza llena de pensamientos absurdos…¿Pensamientos? Si… eso mismo. “Cabeza, deja de jugarme malas pasadas” pero por más que yo pensase eso, cabeza no me hacía caso.

Maldito Dongsaeng… demasiado tiempo juntos, troleando a la gente…demasiadas conversaciones juntos…demasiados momentos, demasiadas noches en vela ensayando…demasiadas noches durmiendo justo en la litera de encima de él con los auriculares puestos, escuchando su melodiosa voz ante mis oídos…Irónico. Duermo en la misma habitación que él y cuando él duerme, yo escucho sus raps…sin que nadie lo sepa, sin que él lo sepa…


En ese preciso instante, hacía lo mismo, aunque mi mano sus sostuviera el libro que Chance me había obligado a llevarme, mis auriculares permanecían en mis oídos evadiéndome de cualquier sonido que no fuera  la voz de  mis chicos…la voz de el…

Principal motivo por el que había salido de Daegu para ir a Busan…

Taecyeon Ok.
Este pequeño desquiciante dongsaeng…de modo oculto, me traía loco. “¿Por qué?” mi mente me preguntaba. El Por qué a las preguntas de mi mente se quedaba sin respuesta…no podía responder de un modo que no fuera incoherente…

Tonto, humilde, guapo, orejotas, trol, fashion terrorist, adorable, trabajador, luchador… me derrito, me derrito, me derrito…

No sé bien que motivo era el más grande para que me hubiera hecho perder la cabeza de tal modo…pero a mi mente le bastaba la conexión con los latidos de mi aparato circulatorio cada vez que hablaba o pensaba en el.

“maldito tren…deja de pararte cada dos por tres o llegaré tan tarde que no tendré modo de encontrarle” murmuraba en mi cabeza, cómo si el mismo tren me fuera a escuchar.

Por suerte, parece que desde ese momento el tren dejó de pararse, y estaba más cerca de Busan, a una parada…al fin, una sola parada me separaba de mi destino.

No dejaba de dar golpecitos con el pie al suelo del tren, mi cuerpo permanecía apoyado contra la puerta de éste, mirando por la ventanilla cómo el paisaje pasaba difuminado ante mis ojos.

Apretaba ligeramente la yema de mis dedos sobre la pasta de ese libro prestado. Maldito Chance, por su culpa, cargaba con un libro que en esos momentos no tenía muchas ganas de leer… mi reproductor me daba mejores cosas que hacer.

Pitido, pitido, pitido…”¡¡¡Pitido!! Junsu, despierta y deja de pensar en Taec ¡El Tren se ha parado!” Puta mente, pendiente de todo, pero ¡Joder! Tenía razón, tenía que salir corriendo o me tocaría dar media vuelta. Así que de este modo, atendí a ese momento de lucidez que mi mente me otorgaba entre mis pensamientos. Pegué un ligero salto entre vagón y andén, y a paso bastante ligero, caminé hacia los piquetes, piqué mi billete, casi mis piernas volaban por la estación hasta la salida. Una vez fuera, respiré hondo, cerré los ojos.

“Junsu, espero que tengas un plan mejor que estar parado en la estación” mente, gracias por no dejarme disfrutar de mis momentos de no pensar en nada. Mi mente cómo siempre, recordándome todo, pero cuando le daba la gana solo…

Agarré la mochila con la mano libre y caminé alejándome de la estación. “Piensa Junsu” me decía a mí mismo, intentando recordar en algún lugar al cual podría acudir…al cual podría ir a buscarle…

En ese instante, mis pies seguían caminando, y mi mente pensando.

¿A que lugar podría ir yo a buscarle? No se me ocurrían demasiadas ideas…mi mente las nublaba de inmediato con su nombre…

Me estaba agotando el tanto pensar en un modo de verle…la falta de cafeína en mis venas y el madrugón me estaban pasando factura…

“Cafeína…¿Cafeína? ¡Claro!”

Mis pies ahora tenían destino, El Café Keopi.

Esta cafetería era uno de nuestros lugares favoritos a los que ir a relajarnos en nuestras vacaciones, una taza de café, buena música, buena compañía…el lugar idóneo para refugiarnos de algunas de las fans locas que andaban por los alrededores. Al tener dos plantas, siempre nos era útil, así arriba no llegaba la visibilidad de las chicas hasta nuestra posición y teníamos intimidad.

Casi siempre frecuentábamos ese lugar, pero en especial Taecyeon y yo pasábamos más tiempo allí…Si, eso de dormir juntos, nos hacía ir juntos a desayunar, y la mayoría del tiempo solos…aun siendo vacaciones…

Todo el camino pensando en encontrarle, y ya estaba frente al Café Keopi. Me sorprendía lo rápido que podía llegar a ser yo mismo sin darme cuenta muchas veces…

Entré, mis dedos se apretaron en las pastas del libro, mis ojos viajaban por la planta de abajo. Ninguna cara conocida. Camino hacia la barra. Olor a café solo… Olor a chocolate…

-Un capuchino, por favor-Le dije a la dependienta. Era una chica joven, no la echaría más de unos veinte.

De inmediato, me preparó mi capuchino. No la recordaba de mis anteriores visitas, era nueva y se desenvolvía bien. En un par de minutos, mi café estaba en el mostrador, pagué a la amable dependienta, Me sonrió. Mi sonrisa también salió de modo agradecido, y mis pies se alejaban hasta las escaleras, con café en mano. Aun sostenía el libro en la otra. En esos momentos me pregunté el por qué lo llevaba en la mano teniendo la mochila. Me gusta complicarme.

Una vez arriba fui a una de las mesas de siempre. Atrás del todo, lejos de ventanas y de miradas.

Mi atención estaba centrada en el ardor del vaso de cartón contra la piel de mis manos. “Hostia tío, como quema el puto café” mi voz interior.

Dejé el libro en la mesa al instante de  hacer lo mismo con el café. Dejé la mochila encima del libro. Posé mis manos  a ambos lados del vaso de cartón. El calor que desprendía me relajaba.

“Umh…Que bien se siente…” “umh…que agradable aroma..” “Vainilla…huele a café con un leve toque de vainilla…”

¿Vainilla? Reconocido olor a vainilla… familiar olor a vainilla…
Mi cuello giró hacia el lado contrario a la pared. Lo siguiente que vi, el rostro de un pequeño endiablado angelito mirándome, sosteniendo un vaso de cartón en sus manos.

-¡Hyung!