El viaje de nuestra vida 05

Título: El viaje de nuestra vida
Autora: Mimi
Grupo: DBSK (5 miembros)
Género: Esto... su mejor definición es crazy!! xDD
Couple/s: Ummm.... ¿se puede poner orgía? Jajajaa Es broma... No en serio... No la pongo porque no se como acabara la cosa xDD
Rating: +15
Observaciones: Puede haber "colaboración" de otros artistas, con permanecía indefinida. Se puede dar yaoi y lemon.
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Entraron siguiendo al hombre que pisaba con fuerza. En cada paso pasaba su peso de una pierna a otra pierna, balanceando su pesado cuerpo.

Pasaron por la puerta principal, les pareció grande y majestuosa, casi les daba miedo. Recorrieron la entrada, al juicio de las chicas allí dentro podrían jugar un partido de tenis profesional sin causar el mínimo daño y pasaron la pequeño, y si era pequeñísimo en comparación a las otras estancias que habían visto en ese sitio, ascensor que quedo realmente cargado.

Allí se podía cortar la tensión tan fácilmente como un cuchillo caliente corta la mantequilla, y no era porque a nadie le incomodara ir allí o tuvieran miedo. Era por el poco espacio disponible. A todos les puso en tensión la violación del perímetro de seguridad que rodeaba su espacio personal.
A todos menos al manager, el cual iba en medio del espacio disponible, completamente ajeno a aquella situación, mientras todos los demás se esforzaban por no tocarlo. Unos por saber del mal humor que este gastaba, otras por intuirlo. Un silencio incomodo no tardo en aparecer en los pocos metros cuadrados.

Evelyn quedo encajada casi al fondo de la pequeña caja metálica, y es casi, porque había una persona mas detrás de ella.
Junsu  miraba la estatura de la chica. Casi le sacaba cabeza y media. Sus cuerpos se rozaban suavemente debido al ligero vaivén que producía el aparato al subir.
Ambos corazones, no sabían por que, bombean deprisa, y ambos dueños de corazones de repente se encontraban nerviosos.

Pos su parte, Sammantha estaba aprisionada en un lado, mirase a donde mirase se derretía, así que opto por mirar fijamente a un punto desnudo de la pared de enfrente.
Pero su cuerpo era harina de otro costal.
En su espalda podía notar claramente el brazo de Yoochun que se inclinaba a su derecha, bien apoyado sobre el barandal metálico y como los músculos se tensaban con cada ligero movimiento que se realizaba. 
A su izquierda, y en su propio brazo podía sentir los abdominales del mismísimo Jae. No sabia muy bine si por que el quisiera o por no darse cuenta, su brazo y el estomago del otro estaba pegados y se rozaban también a causa del maldito o bendito movimiento.
Sammy se estaba poniendo cada vez mas nerviosa, los segundo se hacían eternos, ese cacharro parecía no avanzar, cuando de repente sonó el “Tilin” y las puertas se abrieron. Hizo el ademán de salir pero el único americano de pura cepa que allí se encontraba, se adelanto a ella dando un par de pasos al frente y salio.

-Yo me quedo aquí, tengo que hacer algunas cosas, vosotros chicos encargaos de ser buenos anfitriones con nuestras invitadas -Miro a las chicas- Sed bienvenidas a Corea, nos vemos en la comida.

Sin mas el timbre volvió a sonar y las puertas se cerraron. Inmediatamente después de eso la tensión existente en ese ascensor desapareció.
Se escucho un suspiro general, y todos se movieron al unisono cogiendo distintas posiciones, debido al nuevo espacio disponible.
Los chicos sonrieron, era hora de empezar la función.

-Bueno, ¿Que tal el viaje?- Yunho se acomodo contra la pared del fondo
-Bastante bien... aunque largo.... y aburrido -Evelyn afirmo, jugaba con la cámara medio nerviosa, pero conseguía disimular.
-Normal... son unas quince horas de avión ¿no?
-Trece horas y media.... de miedo a que se estrellara.... -Un escalofrío le recorriera la espalda e hizo que Sammantha se sacudiera suavemente
-Dramática... ya te dije que no lo aria...
-Eso fue suert...- Se quedo estática y miro la techo.

El ascensor dio un bote, las luces parpadearon barias veces y se paro. Sin sonido de puertas abiertas, solo oscuridad. De nuevo silencio entre sus ocupantes, pero barias cosas ocurrieron a la vez.

Instintivamente Junsu alargo sus manos y la abrazo fuertemente a la pequeña pelinegra por la cintura, haciendo que diera un pequeño paso hacia atrás y dejándola pegada a su cuerpo.
Esta contuvo la respiración por una fracción de segundo y al siguiente por pura inconsciencia se dejo hundir entre esos brazos, poniendo sus manos sobre las de el, se sentía protegida. Cero los ojos disfrutando del momento, dejándose embriagar por el perfume del joven cantante, no sabia ni como ni por que había sucedido eso, pero estaba claro que seria un momento que recordaría el resto de su vida.
El por su parte también cerro los ojos, sin palabras, en pleno silencio y en la oscuridad mas absoluta, solo con un gesto, había admitido que sintió un flechazo cuando la vio por primera vez. Estaba seguro que era lo que andaba buscando, y ahora que la había encontrado no a dejaría irse tan fácilmente. En ese momento teniéndola entre sus brazos, una acción que se convertiría en un secreto entre ellos dos, sabia que daría el todo por el todo y que conseguiría ser cien por cien feliz junto a ella.
 Al mismo tiempo Sammantha dio un leve gritito sordo, busco en la oscuridad y apretó la manos contra lo primero que encontró, osea, sendas camisetas de sus coreanos favoritos.
Su corazón latía que parecía una bomba de relojería a punto de estallar, pero esta vez no era por quien estaba, si no por la situación en que se encontraba. Los chicos al sentir el agarre soltaron las manos y las unieron con las suyas. Ella solo apretó.
Evelyn sabia del estado que se encontraba su amiga, así que tomo la iniciativa

-Enn... bueno... parece que se fue la luz.....
-OH DIOS MIO!!!! ESTOY ATRAPADA EN UN ASCENSOR Y A OSCURAS.... -se oyó un suspiro.
-Nivel de histeria aumentado... que alguien la tortee...
-Somos caballeros.... no aremos eso.... - uno de los chicos hablo, no se sabe quien exactamente
-QUE ALGUIEN ME SAQUE DE AQUÍ...
-Lo are yo...- con recelo se separo de su cómodo abrazo, se odiaría a si misma el resto de sus días  por eso, era una oportunidad de oro de estar abrazada por el chico de sus sueños, pero ¿que mas podía hacer?.

Busco en su bolsillo asta sacra su móvil y encendió la cámara. Al segundo siguiente el autoflash iluminaba toda la estancia.
Busco a su amiga y cuando la encontró fue hacia ella. Su mirada estaba perdida e hiperventilaba. Se puso enfrente y levanto la mano.

-Recuerda esto, es por tu bien....

Cogió velocidad  y la bajo con fuerza para abofetearla y antes de que su mano entrara en contacto con la mejilla de la pelirroja, la luz volvió, sonó un muevo “tilin” y las puertas se abrieron. Una mano surgió de repente y desvió la suya propia impidiendo que el golpe se produjera.

-Aut... eso duele....
-Lo siento.... era para evitar que la golpeases....
-Aun así... -se sobo la mano golpeada, poniendo mala cara.

Los chicos empezaron a salir, Yoo y Jae tuvieron que arrastrar a Sammantha fuera de habitáculo, ella aun no se reponía del susto y ellos empezaban a asustarse. Su respiración apenas se calmaba.
Evelyn se quedo a un lado a un lado, aun frotándose la mano, sabia que no lo había echo con mala intención peor el golpe fue duro y dolía.

-Lo siento por le golpe -Silencio-Te recompensaré -Una voz sonó a su espalda, desvió la cabeza subiente y lo vio.

Junsu paso sus manos de nuevo a ambos lados de su cuerpo y froto suavemente la mano de la chica, ella solo se sonrojo en sobremanera.

-¡Ohh! No hace falta... esta bien -le sonrió viendo eso, su corazón volvió a bombear al ritmo de tambores de santería africana, rezo internamente para que el no lo sintiera, el otro negó.
-Te invitare a merendar... eso sera un buen pago, aveces mi hyung no mide su fuerza.
-Gr... -sacudió la cabeza, estaba medio atontada- Gracias, pero no hace falta.- De nuevo se embobo viendo su sonrisa.
-Igual lo are... Y ahora vamos.

Se separo tan rápido como se acerco, dejado a la españolita con ganas de mas, pero no podía, ni pensaba o imaginaba decirle que se quedara así.

Rápidamente emprendieron un camino asta una sala enorme llena de ropa colgada. Por el camino Sammantha se fue tranquilizando y su respiración y actitud pasaron a ser las habituales.
Cuando traspasaron las enormes puestas corredizas y vieron el enorme cuarto lleno de ropa, los ojos les brillaron.
Esa habitación eran una fantasía echa realidad para una chica de veinte años.
Marcas de todas clases estaban colgadas de esos estantes y ellas no podían dejar de míralas.

La mujer encargada de esa sala, y claramente del vestuario de todo, dije que porque no pasaban a mirar entre las estanterías, ellas no tardaron en aceptar la propuesta y rápidamente habían desaparecido de la vista de todos.

La simiente pasara fue maquillaje y peluquería.
Sometieron a las chicas a un tratamiento completo. La trasformaron en autenticas maniquís de exhibición mas se si podían asta darle un aspecto completamente distinto.
No se sabia quien disfrutaba mas si las chicas dejándose transformar por esas manos  los estilistas por tener a supuestas “bellezas europeas” en sus manos.

Al final acabaron sentadas en sillas giratorias delante de grades de un gran decorado muy realistas, grabando con sus cámaras como sus ídolos bailaban una nueva coreografía al compás de la música que sonaba por potentes altavoces repartidos a lo largo y ancho del gran set de grabación.
Llevaban horas allí sentadas, mirando con embelesos, pero... aburridas.... no podían definir ese estado como otra cosa.

Sonó un “CORTEN” y la melodía ceso, los chicos salieron con cara de cansancio y muertos de sed, yendo asta la mesa de comida que habían cerca de sus asientos improvisados, hablando entre si.
Las chicas situadas cercan, no pudieron evitar escuchar y empiezan a cotillear entre si.

Sutilmente sin que nadie se de cuenta de lo que hacen empezó a moverse con disimulo.
Haciendo como que se levantan para ir a comer o a la  fuente, al servicio o simplemente a estirar las piernas, se mueven por le plato como quien no quiere la cosa preparándolo todo para su nuevo y flamante plan de huida.

Los chicos se dan cuenta de la inquietud y en un descanso se acercan con disimulo.

-¿Que estáis haciendo? -Min se agacho a al altura de las sillas de las dos féminas. Con una toalla en el cuello, estaba medio sudado, ellas lo miraron.
-Oye... ¿os gustaría salir de aquí no? -No respondió el mismo, Yoo cogió el relevo.
-La verdad... si... nos gustaría irnos peor no podemos...
-¿Por que? ¿Aburridas?- Yunho respondió con tono burlón, sabia perfectamente que la respuesta era si.
-Mas o menos... - Sammantha se quedo mirado a la secretaria del director, que por enésima vez volvía con un te humeante entre sus manos y sonrió- Pero eso esta a punto de cambiar- Compartio una mirada con su amiga y ambas se quedaron mirándola, los demás miraron con intriga hacia donde ellas veían.

-¿Queréis salir de aquí verdad? Pues nosotras queremos guias para conocer Seoul y... no nos podéis decir que no.... Ese sera nuestro premio por sacaros de aquí... -Evelyn sonrió insultante- Cinco...

Los chicos miraron con extrañeza ¿Era eso una cuenta atrás? ¿que estaban haciendo?

-Cuatro... -Contó Sammantha con el paso de la chica
-Tres...
-Dos...
-Uno.. -Evelyn contuvo la respiración viendo como a su cuenta la chica trompeaba y caía arrojado el contenido de la taza de plástico cobre la pantalla y los controles que el director tenia delante, haciendo que de una forma instantánea el aparato hiciera ruidos eléctricos y comenzara a echar un humo blanco extraño por la parte trasera,  inmediatamente después de eso, la luz del estudio se apago dejándolo todo completamente a oscuras. A excepción de las luces de la bb de las chicas que misteriosamente sostenían en las manos.

Barrios gritos se escucharon a lo legos.

-¿Y ahora Evelyn?
-Ahora... la chica se puso de pie y agarro la dos manos que tenia mas a mano tirando de ellas- Se pone en manchar la retirada estratégica....

Sin esperar nada mas, ambas chicas echaron a correr dirección a la puerta de emergencias, arrastrando a los otros chicos en su camino. Antes de que nadie de allí dentro se huebra dado cuenta, ya ninguno de los siete estaba en el plato.